sábado, 21 de marzo de 2009

Mariposa IV

La penúltima parte =)


"Pero un último rayo de esperanza cayó sobre ella. Allí, en medio de aquella austera soledad inhóspita, el magnífico arco se levantaba desafiante, rompiendo la monótona composición del ambiente. La muchacha titubeó, estaba asustada. Prefería quedarse en aquel paraje patético a volver a deambular entre toda la historia de la humanidad. Sin embargo, cambió de opinión en el mismo instante en que un ser de preciosas alas azules que parecían brillar más que una estrella se reflejó en sus desesperanzados ojos verdes. La mariposa estaba allí de nuevo, frente a ella. Por fin la había encontrado, por fin su búsqueda había concluido. ¿Qué haría ahora? ¿Traspasaría el arco esta vez? Las dudas se entremezclaban en su diminuta mente sin dejar claridad para ver la respuesta a una pregunta que nadie más podría responder.

Una extraña fuerza la empujó a pasar en cuanto vio que también la mariposa entraba. Y al encontrarse en el otro lado su alma se liberó, su misma esencia echó a volar por un limpio y envolvente cielo. Se vio a ella misma descalza sobre un lecho de fresca hierba del verde más intenso que jamás había visto, y sus ligeros pies disfrutaban con las caricias de la tierra suave que se escondía bajo el uniforme manto de plantas. Árboles de inconmensurables copas teñían de oscuro el suelo con su relajante sombra, un festival de mil aromas desfilaba por la brisa y las flores surgían con majestuosidad, dando la sensación de que retozaban alegremente por el paraíso. Sus coquetos pétalos planeaban hasta posarse tranquilos sobre la blanda superficie de un lago de agua cristalina tan espejada que, al intentar descifrar los misterios de su fondo, podía alcanzarse a ver el contorno del alma que en uno mismo descansa."

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